Nuevamente Hurrem se encontró cara a cara con Mahidevran. La esposa del sultán tuvo que ponerle un freno a los dichos de la madre del príncipe Mustafá.
En esta ocasión ella sugirió sobre la envidia que le tienen al hijo al ser sucesor al trono y acusó a Hurrem muy sutilmente de ser una conspiradora contra la vida de Mustafá.
Hurrem no soportó que la quiere acusar de esa manera adelante de todos y comenzó a levantar la voz para dejarle bien en claro algunas cosas. En ese momento ingresó Mustafá y le gritó a Hurrem.
Le aclaró que no quiere verla tratar así a la madre y que ella esta llorando siempre por su culpa. Además, aclaró que él es el sucesor al trono del imperio otomano por lo que debe respetarlo.
Así es que Hurrem parte directo a ver a Suleiman y le comenta la situación. Él manda a llamar a Mustafá para aclarara las cosas y resolvió que la culpable fue su esposa, por ende, le pide que se disculpe con su hijo.
Pero ¿le ofrecerá disculpas a Mustafá? ¿Será capaz de no seguir su orgullo?
Hurrem no puede creerlo y se queda callada y trata de explicar que no es justo. Suleiman le dice que pidiendo disculpas demostraría la clase de persona que es y lo estimularía a respetarla aún mas.
Hurrem entre lágrimas no le queda mas opción que pedir a Mustafá que la perdone. Él acepta las disculpas y luego se retira.
Como es de imaginarse la esposa de Suleiman queda muy triste y con bronca por esta situación.
