Ibrahim lucha por su vida luego de haber recibido un flechazo en la espalda y esta contenía veneno el cual lo deja muy cerca de la muerte. El pronóstico es desalentador, de hecho, el médico dice que no podrá sobrevivir y que morirá. Solo un milagro puede salvarlo.
La desesperación de Hatice y Suleiman es enorme. Si muere deja a una esposa embarazada sola y a un amigo como lo es el gran emperador. Pero no pierden las esperanzas a pesar de que se ve muy difícil que salga victorioso de esta situación.
Su amigo Nazuh Efendi le sugiere al Sultán que podrían llevarlo a unas cavernas que tienen pozos con aguas milagrosas. Al parecer estas aguas pueden aliviar el dolor y además quitar el veneno.
Es por eso que urgentemente Suleiman pide al médico a cargo que lo prepare al gran visir para llevarlo allí a fin de salvarle la vida. Junto a él irán también Firial, Sumbul, Nazuh y varios soldados.
Allí en uno de los piletones está Ibrahim entre la vida y la muerte y a su lado Firial. Ella llora muy triste porque ve que su gran amor prohibido se muere. En cierto momento lo besa mientras él duerme.
Cuando lo está besando alguien llega.
¿Quién será que encuentra a Firial besando a Ibrahim?
En ese momento justo llega Sumbul y se esconde mientras observa la situación. Por supuesto, Ibrahim está inconsciente y ella aprovecha a besarlo. Sus caricias se vuelven mas intensas y es obvio para cualquier persona que observa la situación que está enamorada.
Sumbul no puede creerlo y luego le dice a Firial que la vió en esta situación. Ella le suplica que no diga nada a nadie. Sumbul le dice que debe olvidarlo y mucho mas ahora que su boda está cerca.
¿Será que Sumbul no la delatará? Ya veremos en próximos capítulos lo que sucede.