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Chico come universo final explicado
Kroll irrumpe en la residencia de los Bell, exigiendo que Lyle revele el paradero de su reserva de sustancias ilícitas. Antes de ser llevado, Lyle escribe algo con los dedos para Gus, quien se niega a comunicarse con Kroll.
Tras dejar inconsciente a Frankie, el agresor amenaza con mutilar el dedo de Eli, el protagonista de «Boy Swallows Universe», y es en ese momento cuando Gus rompe su silencio después de varios años.
No obstante, lo expresado por Gus no es lo que Kroll desea escuchar, y procede a cortar el dedo del joven. Este despierta en el hospital dispuesto a revelar la verdad.
Slim le expone que su madre asumió la culpa, inventando una versión sobre cómo su hijo menor perdió el dedo. Por lo tanto, Eli debe confirmar esa narrativa ante médicos y autoridades, ya que Bich Dang tiene influencia sobre policías como Tim Cotton.
Frankie es sentenciada a cuatro años de prisión, y la custodia de los hijos queda bajo la responsabilidad de Robert Bell. Entretanto, Eli escapa del hospital y busca a la periodista Caitlyn Spies para compartir su historia, con la esperanza de rescatar a Lyle.
Durante la breve conversación, se entera de que su padrastro ha sido asesinado, optando entonces por regresar a su hogar.
Visiones reveladoras y desafíos familiares
De alguna manera, Gus anticipa el futuro a través de sus ilustraciones. En el cuarto episodio de «Boy Swallows Universe», Gus comparte con Eli sus visiones y la enigmática llamada en el escondite de Lyle.
Explica que reviven las mismas experiencias una y otra vez, aprendiendo de los errores cometidos en cada intento. Además, Gus sostiene que la voz que Eli escucha en el teléfono desconectado pertenece a Gus del futuro.
Mientras tanto, Frankie anhela la visita de sus hijos, pero Robert, debido a su alcoholismo y agorafobia, no puede llevarlos.
Esto lleva a que Frankie recaiga en el consumo de drogas y la consejera escolar, acompañada por la policía, se presente en casa de Robert para llevarse a los niños.
Después de sincerarse sobre su situación y comprometerse a cuidar adecuadamente de sus hijos, Robert logra retener la custodia.
No obstante, al momento de visitar a Frankie, sufre un ataque de pánico. Ante esta situación, Eli busca apoyo en Slim, quien revela que enfrenta un cáncer terminal. En el funeral del anciano, Eli entabla amistad con un conocido de Slim que lo ayuda a enviar cartas a su madre.
Ante la falta de respuesta, Eli decide infiltrarse en la prisión para encontrarse con su madre. Logra dialogar con ella y obtener la promesa de que dejará las drogas. Descubierto en el intento de escape, el niño es atrapado por los guardias, pero sorprendentemente lo dejan ir con una advertencia.